en un país multicolor... pocas abejas maya, pocas hormiguitas y muchas cigarras... dónde quedó el instinto de supervivencia, la brillantez, la solidaridad, el sentido común? y bien? entre nosotros anda el juego, mirar y culpabilizar a la clase política, a la economía, es por supuesto un gran deporte pero el mejor deporte es nadar hasta la orilla y no ahogarnos en los remolinos de la corriente... aquellos que puedan que naden, los que no, que recen para que los que nadaron vuelvan con chalecos salvavidas(qué facil resulta decirlo) nada es más humano que la empatía, nada más humano que la inteligencia y su uso para dar un giro a toda situación, nada más estúpido que el que se compadece y desalienta a su entorno...
Totalmente de acuerdo, me ha encantado el post. Los momentos difíciles son una oportunidad para sacar lo mejor de nosotros mismos y evolucionar como personas, y lo mejor puede salir de la serenidad y de ser optimistas.
ResponderEliminarSer optimistas no en el sentido equivocado de que por pensar de que las cosas van a salir bien va a ser así, no, no creo en ese efecto pigmalión. Optimistas en el sentido de ver que se puede sacar de positivo de cada situación, sabiendo que existe el otro lado negativo (la botella medio vacía o incluso 3/4 vacia o más), pero no estar permanentemente enfocado en eso, eso no resuelve nada, solo gasta energías en negatividad, y ahora hay que usarlas para nadar...