domingo, 6 de diciembre de 2015

on knees

nos hemos acostumbrado a amar de rodillas aunque de puertas a fuera seamos gigantes inflexibles, erguidos e insumisos... nos hemos pertenecido como caballos indomables que encuentran a su dueño y nos hemos dejado domar a base de horas, susurros y caricias sin precedentes... el amor no tiene edad de jubilación...

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